Dentro de las noticias curiosas que cada día ocurre en el mundo, destaca una referente a un gato y una herencia en Italia. En los últimos días, en el país europeo, mucha gente está comentando la sorprendente noticia de que un gato llamado «Tommaso» acaba de heredar de su dueña 10 millones de euros.
María Assunta, dueña del gato, falleció hace dos semanas a la edad de 94 años. No tenía parientes ni amigos destacados y su única compañía era su amada mascota, el singular gato Tommaso. Dos años antes, María había adoptado a este gato tras encontrarlo abandonado en la calle en un mal estado.
La anciana tenía devoción por su mascota. Así, en octubre de 2009 María Assunta redactó su testamento. En él, se especificaba que todos sus bienes serían para su gasto cuando se muriese. La anciana italiana disponía de una villa y dos apartamentos en Roma y Milán, tierras y varias cuentas bancarias. Toda un fortuna valorada en 10 millones de euros.
Stefania, la enfermerda de la difunta, se encargará de administrar la herencia legada al gato. Asimismo, el testamento aclara que cuando el gato fallezca, todo el dinero irá destinado para atender a los animales abandonados. Este hecho demuestra el incondicional amor de María Assunta por los animales.
No es el primer caso ni será el último en el que alguien deja su herencia a su mascota. Los animales suplen de tal modo las carencias afectivas que pueden llegar a ser tratados como personas en temas como el testamento o la herencia.
Sobre todo, en caso de gente solitaria o ancianos, las mascotas resultan vitales en la vida de esas personas. Se llegan a convertir en algo más que una mascota. Los psicólogos han certificado el gran apoyo emocional y vital que producen las mascotas en ciertos seres humanos.
