Hace unos días nos enterábamos que la Guardia Civil había encontrado en una casa de Cáceres nada menos que más de 100 perros congelados y una buena cantidad de perros vivos pero en condiciones bastante lamentables. Esto no es nuevo y por desgracia, el dueño de estos perros congelados, está ahora en libertad, algo que no es precisamente una buena noticia.
Esta persona compraba perros enfermos en Eslovaquia, perros que compraba a un precio muy económico y luego sencillamente los congelaba cuando ya morían, algo que ocurría a los pocos días de llegar cada perro, porque se tratabas de perros de diferentes razas y con diferentes deformaciones.
Ahora esta persona ha quedado en libertad y curiosamente se siente una víctima de todo lo sucedido, además de comentar que ofrecerá una rueda de prensa para explicar todo lo sucedido con los perros congelados y con sus instalaciones, por lo que tendremos noticias de esta persona.
Cada uno es libre de pensar lo que le apetezca y este tipo de noticias no deja lugar a pensar algo bueno de esta persona, ya que nadie normal puede tener congelados perros como si se tratase de cualquier otra cosa. Lo cierto es que estos pobres animales congelados no pueden defenderse y no se puede saber si murieron antes o después de ser congelados.
Lo peor de todo es que estos casos quedan sin castigo en la mayoría de los casos, incluso las personas que hacen estas cosas se presentan como víctimas de todo, algo poco creíble.
