Si tienes un acuario en casa sabrás que, de vez en cuando, tienes que limpiarlo. Lo que quizás no sepas es que hay dos formas de limpieza de los acuarios, una la rápida y otra la más lenta y tediosa (pero con la que se obtienen mejores resultados).
Nosotros te explicamos en estas líneas las dos formas que tienes para limpiar tu acuario, ya sea un acuario grande o uno pequeño (obviamente si es pequeño podrás limpiarlo antes pero también te diré por propia experiencia que los acuarios pequeños dan más problemas).
Limpieza rápida. Esta limpieza se suele hacer cada mes o cada dos meses y consiste en quitar un tercio del agua del acuario renovándola por agua nueva. Sin embargo, no se quita de arriba sino que lo que se hace es, mediante una bomba (puedes comprar una por 3 euros en las tiendas de animales) la metes y va succionando del fondo el agua con lo que arrastra con ella la suciedad y se limpia el acuario completo.
Limpieza lenta. La limpieza lenta se hace cada 6-7 meses y consiste, como ya te figurarás, en vaciar todo el acuario y fregar todas las piezas del mismo: plantas, piedras, aparatos, etc. para que estén limpios. Esto puede tardarse unas 2 horas si el acuario es grande (el mío es de 60 litros y tardo eso) o menos si es pequeño.
En esta, por supuesto, tendrás que sacar un tiempo a tus peces para lo cual yo te recomiendo usar el mismo agua (para que no sufran demasiado el cambio de agua).