Los gatos son animales muy territoriales, algo huraños en ocasiones, asustadizos y escurridizos; se sienten muy a gusto en su casa. Por ello, los gatos suelen plantear problemas a la hora de adaptarse a una nueva casa debido a una mudanza. Podrían sentirse inseguros y temerosos en la nueva vivienda y tardarán un tiempo, mayor o menor dependiendo de cada gato, en vivir felices y tranquillos allí.
Los gatos se suelen aferrar al olor, la forma y hasta a la luz de un hogar. Por ello, el gato tardará no menos de tres semanas en conocer, olfatear, y, especialmente, acostumbrarse a la nueva vivienda sin ningún temor y estar tan a gusto como en su antigua morada.
Incluso en caso de que el gato sea macho y no esté castrado, hay más posibilidades de que quiera abandonar la casa y, una vez que lo haga, será imposible que vuelva. En cambio, con una hembra no existe tanto riesgo. La clave es tener paciencia y seguir varios consejos como no cambiar la funda del sillón en que suele recostar el gato, mantener su manta sin lavarla para que mantenga totalmente su olor y no dejar muy solo al gato en los primeros días.
Los gatos se suelen estresar con facilidad. Por ejemplo, sacarlos a la calle puede ponerles muy nerviosos pues le encanta la tranquilidad y la seguridad que sienten en el hogar. El ruido de la calle les pondrá nerviosos. Con tal motivo, para trasladarlos a una nueva vivienda hay que llevarlos en un traspontín, con su manta y una tapa segura.
Algunos veterinarios recomiendan no cambiar la arena o el aserrín que tiene el gato en su caja, incluso aunque esté sucia, y llevarla a la nueva vivienda para que continúe usándola unos días más. Esto le ayudará a que los cambios no sean tan bruscos y continuos.
Por último, hay que mantener las puertas y ventanas cerradas servirá para evitar que se escape. Si se esconde bajo una cama o un mueble, no hay que preocuparse pues tarde o temprano saldrá en busca de alimentos y se irán acomodando al cambio. Lo más importante es no agobiarle, darle tiempo y mostrarle más cariño que nunca. El gato necesita nuestro apoyo en estos momentos.
