El Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) de la Guardia Civil de Barcelona ha intervenido 114 cachorros de perros y tres gatos provenientes de la República Checa que habían sido introducidos de manera irregular en España.
La Unidad Fiscal de la Guardia Civil del aeropuerto de El Prat detectó un primer envío de 69 cachorros de perros y tres gatos, y un segundo envío de 45 cachorros de Praga que presentaban claras irregularidades.
A continuación, la Guardia Civil apercibió de las primeras medidas al destinatario de estos naimales y requirió a agentes del SEPRONA, que junto a veterinarios de la Generalitat de Cataluña se trasladaron hasta el comercio en el que iban a venderse estos cachorros de perros y gatos.

Entonces, se vió que los animales no tenían ni tres meses (edad mínima para el movimiento comunitario de animales) ni habían sido vacunados, por lo que se procedió a su inmovilización de forma inmediata.
Con estas actuaciones, el fin de la Guardia Civil pasa porque el comprador de una mascota reciba al animal con todas las garantías, asegurando que tiene una procedencia legal. Las actuaciones llevadas a cabo por la Guardi Civil han permitido determinar que el movimiento de animales tiene lugar por las vías terrestre, marítima y aérea.
Además, la Guardia Civil hace un llamamiento a que los ciudadanos que se dispongan a comprar una mascota sean conscientes de que el animal necesita atención y unos cuidados mínimos. Asimismo, recuerda que los refugios y perreras albergan a miles de animales de diversa condición que se pueden adoptar de forma gratuita.
En caso de querer comprar un perro o gato, la Guardia Civil recomienda acudir a un centro autorizado y reclamar la información sobre el origen del animal, pidiendo el pasaporte sanitario correspondiente y comprobando que cuenta con el microchip.


